La acusación del exsargento Segundo Gómez Reátegui contra Ollanta Humala, a quien imputa crímenes cometidos en la localidad de Venenillo, provincia de Leoncio Prado, en Huánuco, sería una gran farsa ya que el actual candidato presidencial no prestó servicios en la zona en el año 1993, como asegura el supuesto denunciante.La versión de Gómez carecería de credibilidad porque este sujeto tiene un antecedente que le resta credibilidad: Gomez fue detenido y está acusado por el robo de computadoras de la Universidad Nacional Agraria de la Selva (UNAS), ubicada en Tingo María.
La denuncia la hizo el electo congresista Javier Diez Canseco que sostuvo que la versión del exsargento que intenta comprometer a Humala en la muerte de seis personas es un testimonio sin valor.
“Sus declaraciones no son ciertas y no corresponden a la realidad. Un testimonio de ese estilo no tiene ningún valor. Él dijo que los hechos se produjeron en 1993, pero Ollanta Humala no estuvo de servicio en ese periodo”, indicó el virtual congresista.
Además de eso añadió que su versión entró en contradicción, porqué en televisión declaró que Ollanta habría regresado después de una primera fase de su servicio a la zona. Sus incoherencias, sumadas a sus antecedentes delincuenciales le quitan valor a su versión. “No es una persona confiable ni creíble”, enfatizó.
El congresista explicó además que las acusaciones por el caso Madre Mía ya fueron archivadas por el Poder Judicial. “Él dice que le contaron algo, y quien se lo contó lo había escuchado de otra persona. Es una versión sin sustento y este es un caso que ha sido visto por la Corte Suprema y por magistrados con peso como el actual presidente del Poder Judicial, el doctor San Martín. Eso ya fue archivado y es un refrito que está siendo reavivado por el régimen y sus influencias políticas en función de tener un provecho determinado contra Humala”.
Conocido delincuente
Agentes del Departamento de Investigación Criminal del Frente Policial Huallaga lograron la captura del cabecilla de la banda que en los últimos meses planeó y ejecutó el robo de trece computadoras ubicadas en las instalaciones de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Nacional Agraria de la Selva (UNAS).
Tras varias semanas de un paciente trabajo de inteligencia, los agentes policiales identificaron a los integrantes de la organización delictiva. Lo sorprendente fue que el cabecilla de la banda era miembro del cuerpo de seguridad de la universidad, y se desempeñaba como de jefe de grupo. Captura se logró tras varias semanas de paciente trabajo de inteligencia. El sujeto fue identificado como Segundo Gómez Reátegui, de 33 años, y fue capturado la noche del último lunes.
En presencia de la fiscal Keyli Garay Robles, el delincuente
reconoció haber participado en el robo.
De acuerdo a las investigaciones de la Policía Nacional, esta organización estaba conformada por otros miembros del servicio de seguridad de la UNAS, entre ellos se encuentran Gabriel Orlando Rojas Moquillaza (33), Christian Trujillo Gonzales (36), Antonio Pérez Mendoza (32) y Evert Espinoza Ramos (26), quienes son investigados y en los próximos días se determinará sus responsabilidades.
El comandante PNP Hugo Arescorunaga, encargado de las investigaciones, indicó que estos sujetos habrían actuado de tal forma que “durante un buen tiempo sustrajeron sistemáticamente varios equipos en distintas áreas de la casa de estudios”.
Asimismo Gómez Reátegui, afirmó ante el Segundo Juzgado Penal Liquidadora Anticorrupción, que Humala pagó sobornos a testigos a fin de que modifiquen su versión respecto a supuestos abusos y crímenes cometidos en 1992 en la base de Madre Mía.
Cabe indicar que la periodista Rosa María Palacios recordó tal noticia en su cuenta de Twitter y se preguntó por qué sigue libre este sujeto.
Los falsos testimonios que dio en 'Prensa Libre' no coinciden con la fecha de servicios de Ollanta Humala en esa base antisubversiva según indicó la propia Rosa María Palacios.
La periodista dijo también que el día del juicio sobre el caso 'Madre Mía' este delincuente jamás apareció en los tribunales para acusar a Humala.
En las elecciones del 2006, opositores a la candidatura de Ollanta Humala también presentaron un “testigo” que la prensa lo presentó como asilado venezolano quien despotricó contra el candidato de Gana Perú.
La campaña de desinformación contra el candidato Humala cuenta naturalmente con el apoyo del fujimontesinismo.
De esta forma se volvió a desiinflar otra de las operaciones demolición de la prensa contra la candidatura de Humala , contenida en el denominado 'Plan Sábana'.
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