La destrucción de un parque hizo detonar las protestas contra la "islamización" del país que ya hadado como resultado 4 muertos, cientos de heridos mientras miles de personas han sido detenidas en 67 ciudades turcas.
¿Qué desató las protestas?
Un plan urbanístico en Estambul prevé la destrucción del céntrico parque Gezi, del que se talaron varios árboles
la semana pasada. Lo que comenzó como una protesta pacífica contra este
hecho, ha desembocado en unas encendidas protestas desde el pasado
viernes en diversas ciudades del país, aunque hoy parece volver poco a
poco una tensa calma.
En principio, se anunció que el parque desaparecería para dejar hueco
a un centro comercial y viviendas, aunque ahora el primer ministro Recep Tayyip Erdogan ha asegurado que no se construirá ese centro comercial. "No hay ningún proyecto concreto", ha afirmado según Reuters, pero sí derribará un centro cultural y construirá una mezquita además de otras edificaciones.
¿Cuál es el trasfondo de las quejas?
"Ya no se trata del parque, sino de una lucha contra la actitud dictatorial del Gobierno: cada vez que tres o cuatro colegas se manifiestan por algo, mandan un blindado de la policía",
ha denunciado Melike, una estudiante que ha acudido a limpiar la basura
provocada por las protestas en el ya simbólico Parque Gezi, a la
agencia EFE.
En un país de mayoría musulmana que ha presumido durante mucho tiempo de su laicismo, no han sentado nada bien las recientes restricciones a la venta de alcohol y advertencias contra las muestras de afecto en público.
La ONG Human Rights Watch (HRW) denuncia que esta violenta respuesta
policial se ha producido inicialmente contra unas protestas pacíficas.
"La falta de respeto del Gobierno al derecho de manifestación está alimentando el descontento entre la gente de Turquía", ha asegurado Emma Sinclair-Webb, investigadora sénior de HRW en ese país.
¿Cómo responde el Gobierno de Ankara?
Gases lacrimógenos, balas de caucho y cañones de agua han servido
para dispersar a cientos de manifestantes, también a una muchedumbre que
intentó llegar el domingo a la sede del Ejecutivo en Ankara. Los gases lacrimógenos han llegado a al menos un hospital y edificios de viviendas, debido a que las protestas se producen en pleno centro de la capital y otras ciudades.
Caceroladas, cócteles molotov y barricadas en fuego son las armas de los manifestantes, después de que las protestas en el parque Gezi comenzaran de manera pacífica.
¿Qué pasa con los detenidos?
El lunes ya había más de 750 personas apresadas por los duros enfrentamientos con la policía solo en Ankara y Esmirna, según los medios locales. La agencia Reuters eleva la cifra total a miles de detenidos en 67 ciudades.
Por otra parte, 200 abogados voluntarios no han conseguido permiso para ver a los apresados en Ankara.
Erdogan acusa a la oposición de calentar los ánimos en el pueblo y ha
declarado: "No podemos quedarnos mirando cuando algunos agresores
provocan al pueblo".
¿Hay muertos o heridos?
La oposición denunció primero la muerte de al menos un hombre de 26
años, fallecido supuestamente por un disparo recibido el sábado en la
cabeza, aunque no hay confirmación oficial. Lo que sí está claro es que
otra persona murió atropellada durante los disturbios y fuentes oficiales confirmaron después la muerte de otro joven por un disparo en la cabeza que pudo provenir de la policía. Se han contabilizado al menos tres muertos por las protestas.
Tras los primeros cuatro días de protestas, había 79 heridos según
fuentes oficiales, mientras que fuentes extraoficiales cifran en unas
1.500 las personas que han necesitado asistencia hospitalaria. Por
ejemplo, un manifestante ha perdido un ojo, aparentemente por culpa de
la violenta represión policial, según HRW.
¿Informan los medios de comunicación turcos?
Parcialmente. Los manifestantes acusan a los medios de participar en
una censura impuesta por el Gobierno de Erdogan y denuncian que se
tienen que informar a través de medios extranjeros para saber qué está
pasando.
¿Cómo está la situación ahora?
Algunos trabajadores han manifestado a EFE que no acudirán al trabajo a principios de esta semana, aunque la situación comienza a calmarse en las distintas
ciudades después de más de 90 manifestaciones solo entre el viernes y el
sábado, según las autoridades. Un sindicato de profesores ya había
anunciado una huelga para el martes.
¿Qué opinan los turcos de Erdogan?
El primer ministro turco continúa siendo "de lejos" el político más
popular del país a un año de las elecciones presidenciales, subraya
Reuters. Sin embargo, quienes se movilizan en las calles ven una actitud
autoritaria e islamista en Recep Tayyip Erdogan, que acusa a la
oposición de avivar las llamas de los disturbios.
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