A medida que pasa el tiempo crece la incertidumbre sobre el futuro que correrá el proyecto del Gasoducto Sur Andino (GSA). Es por ello que políticos y autoridades de la región Cusco califican de una “traición del Gobierno del presidente Ollanta Humala a las regiones del sur”.
Erick Escalante Cárdenas, presidente del Consejo Regional de Colegios Profesionales (Corepro), sostuvo que al priorizar el etanoducto, “el nacionalismo está a punto de sepultar el gasoducto sureño y los sueños de progreso del sur”.
En tanto el director regional de Energía y Minas, José Huamán Velasco, dijo que el gobierno, además de incumplir sus promesas electorales, “está yendo en contra de los intereses del sur (y) postergando el desarrollo regional”.
Para Víctor Boluarte, electo decano del Colegio de Abogados de Cusco, las idas y venidas del actual régimen en cuanto al GSA es fruto de la “falta de visión de los gobernantes sobre el desarrollo integral del país, que debe incluir al sur peruano”.
“Hay una visión errada de este gobierno que debería promover el desarrollo del sur y no postergarlo", anotó.
Con información de La República
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