Un acusado por el delito de lesa humanidad con gran crueldad ha sido designado por el Partido Aprista como candidato a la presidencia regional de Tacna. Se trata del militante del APRA, Enrique Melgar Moscoso que es secretario general departamental de ese partido y jefe zonal del Organismo de Formalización de la Propiedad Informal (Cofopri) en Tacna. Melgar Moscoso es juzgado actualmente como uno de los cabecillas del tristemente célebre “Comando Rodrigo Franco”, organización paramilitar que actuó en el primer gobierno de Alan García bajo la autoridad del ex ministro del Interior Agustín Mantilla y de altos mandos policiales. Sin embargo esto no le ha importado ni la dirigencia ni a sus bases en Tacna que lo eligieron como candidato en elecciones internas apristas, a pesar de sus antecedentes.Según testimonios de un ex miembro del “Comando Rodrigo Franco”, durante el primer gobierno de García, Melgar Moscoso reemplazó a Miguel “Chito” Ríos en la jefatura civil operativa del escuadrón de la muerte, cuando Ríos resultó gravemente herido en un fallido atentado contra el local del “Diario Marka”, en 1987, donde murieron otros dos miembros de la organización terrorista paramilitar.
El cuestionado sujeto es un miembro de número de la llamada “generación de los cuarentones” y hombre cercano a Omar Quesada y Agustín Mantilla.
Pero lo que pocos saben y quizás muchos olvidan intencionalmente hace poco mas de veinte años era el jefe del grupo A de inteligencia para ejecuciones del “Comando Rodrigo Franco”, encargado del seguimiento y preparación de asesinatos de opositores al gobierno, lo cual fue una practica sistemática de Terrorismo de Estado llevada a cabo durante el primer gobierno del actual presidente Alan García Pérez
Este grupo estaba conformado por Melgar Moscoso, como mando principal, y Carlos Farfán Yacila, Óscar Urbina, Nidia Vílchez Yucra, Ricardo Ramírez y Alcides Velásquez Castellares.
El periodista Ricardo Uceda lo menciona en su libro “Muerte en el Pentagonito”, como un allegado cercano de Abdón Vílchez, padre de la ministra Nidia Vílchez, diputado por Junín durante ese periodo, y patriarca del APRA en Huancayo, que prestó terrenos de su propiedad para el entrenamiento de los militantes del partido, por elementos de la policía.
El juicio que actualmente se le sigue a Melgar Moscoso es por delito contra la vida, el cuerpo y la salud y homicidio calificado, según denuncia de la 2ª. Fiscalía Supraprovincial, que despacha el fiscal Julio César Cordero Bautista, lo que ha sido acogido por el 4to. Juzgado Penal Supraprovincial, a cargo de Teófilo Armando Salvador Neyra. Según el expediente se le acusa del asesinato del abogado Manuel Febres Flores, el 28 de julio de 1988, dentro de una relación de nueve acusados, dentro de los cuales figura como el tercero en el orden jerárquico, detrás de “Chito” Ríos y el policía Jorge Huamán Alacute.
De acuerdo a la acusación, la responsabilidad del actual postulante a la presidencia regional de Tacna se centraría en haber estado “a cargo del reglaje y seguimiento al abogado Manuel Febres Flores por parte de un grupo de inteligencia que estaba integrado por Farfán Yacila y Urbina Sandoval, así como se tendría que habría intervenido en el secuestro y posterior ejecución (asesinato de Febres)…”, lo que se desprende de diversos testimonios.
Melgar Moscoso tomó parte, según denuncias, además en otras acciones criminales de su organización, como el secuestro de uno de los miembros del comando que pasó a la condición de informante de la justicia y fue torturado y abaleado para que desista en sus confesiones.
Con respecto al juicio, hasta la fecha Melgar se encuentra con libertad restringida, en base a una caución de 5 mil soles ordenada por el Juzgado. Debe firmar en el juzgado una constancia cada fin de mes, no puede salir del país y está próximo a sentarse en el banquillo de los acusados en lo que será uno de los juicios más importantes de los últimos años.
Sin embargo, se siente respaldado por el gobierno, al punto de pretender ser elegido para ocupar la presidencia de la región Tacna
Casos como este no solo confirman el grado de impunidad con el que cuentan muchos acusados por crímenes de lesa humanidad, con el beneplácito del gobierno aprista y que como el tan promocionado asesino holandés tienen un pasado oscuro.
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